jueves, 29 de mayo de 2008

Un Mensaje en la botella

En algún momento que no recuerdo llegué hasta acá. Me trajo una ola gigante a la que me subí cuando volvía del norte. Pensé que sería entretenido. Pensé que en el trayecto podría encontrarte a ti, pero me vi llegando a la playa sin más abrigo que las ganas de estar contigo y sin más amparo que el recuerdo del comentario sabroso, del chiste inglés que aprendimos en el mismo barrio ingles mientras buscábamos la entrada al club de jazz.

La ola se fué y me dejó acá varado, taciturno y melancólico. Con la brisa fresca burlándose de mí cara de sorpresa, la que puse al saber que detrás de la pantalla las cosas no fueron reales. Mejor me quito el calzado y salgo a caminar por la arena, dejando las huellas marcadas en forma de corazón. El mar que me separa de ti ya no se ve tan amable como cuando recién te conocí, la hola se fue y la brisa silva la melodía melancólica de una canción de calamaro sólo para recordarme que como tu lo mencionaste, sólo se necesitaba una oportunidad para ser feliz.

No podría decir que no te extraño, pero no puedo recordar si fue sólo algo virtual que imaginé mientras leía la poesía que no te gustaba. También puede ser eso, tal vez esto nunca fue real, son las maravillas de la ciencia que nos acercan a seres excepcionales que creemos que están ahí, que creemos querer pero que finalmente están al otro lado de este mar de datos binarios en forma real, separados por este espacio virtual.

Si eres real o no ya no lo tengo claro, cómo llegué a este lado del océano tampoco. Lo que si sé es que mientras soñé que te quería me entregué a la ilusión. Mientras creí que era cierto me agité un poco con esa agradable forma de palpitar arrítmico, eso que te hace creer que estás vivo y que has superado las extrañas formas del anonimato. Fuiste real en mi mente, fuiste verdad en mi corazón que se agitaba a ratos esperando tu saludo, fuiste tan cierta como el beso que te robé junto mar.

Ya no estás cerca, ya no sé donde estás ni como estás, espero que estés bien, espero que allá en tu propio planeta, en tu propis espacio el universo te dé lo que te mereces. que creo que no será poco. que visites los cisnes y que alguno de ellos te pregunte por mi. sip, por que ellos deben recordar que al menos yo estuve ahí antes de notar que era sólo el tiempo y el espacio el que jugaban con una absurda forma de amor virtual que me engañó por algo más de dos segundos.

Llevo demasiado tiempo extrañándote, a pesar que todo sigue igual, a pesar que la revolución no ha tomado vacaciones y sigue pensando en cancún he llegado a la conclusión que mirando hacia la playa como los moais el brillo de la pantalla no se trocará por tu sonrisa temerosa. Cada quien es su dimensión ha seguido el camino de sus propias flores y tu pantallas no fiue capazs de cruzar el mar para librarme del sueño de volver a verte. el temporal ya pasó y la lluvia se fué, el mar no se disipó y sólo noté que no estabas ahí cuando el agua me despertó mojándome los pies. Y te busqué por toda la playa sin lograr saber en que quedó la frase dicha en dos palabras que m hacía sentir rey.

Mejor que suspirar es encontrar algo para acortar las distancias. Una botella de ron desechada por los piratas de videojuegos puede ser la solución, taponeada artesanalmente con un trozo de corazón, guardará el recuerdo tivio de tu humor cálidamente parco; delicado y tierno. poderosamene estimulante. Una botella de ron desechada por los piratas de musica pop y taponeda con los desechos de un PC me servirá para tratar de llegar a ti ahora que el mar ya no me deja pasar hasta la otra dimensión. Espero que la corriente la lleve hasta la playa donde caminas desnuda, hasta la arena blanca que se luce bajo el faro que nos guió y nos alumbró la primea vez que dejamos de lado el mundo vitual para creer que eramos capaces de crear una algo real.

Sueños, pequeñas ilusiones, nada más. Espacios y tiempos que nos hacen creer que tenemos derecho superar los estados que nos convierte en sólo el segundo que vivimos. Espacios virtuales que nos hacen pensar que el oceano no es frontera sino el medio que nos une, a pesar de los cientos de kilómetros que hay tras ambas pantallas.

Aún te quiero, y de verdad espero que en tu mundo seas feliz, por que yo en el mio fui feliz de saber que te quería aunque sólo fuera un amor virtual.

Se va entonces la botella añosa, a recorrer la corrientes para varar en la playa donde la conocí.

martes, 20 de mayo de 2008

Senti Dos

Si tiritas un poco, si haces algún gesto como escalofríos o leves tercianas comenzaré a buscar tus zonas más sensibles...

No dejaré que la música se termine, se terminaría todo, se acabaría todo, por eso tendré que programarla para un buen rato por que iré despacito… No por que tenga que ser así, sino por disfrutar de ti es como comer chocolate, que se debe mascar de a poco, se debe disfrutar de a poco, Se saborea con dulzura, suavemente.

La música y tu estimulan mis sentidos, todos... Las yemas de los dedos le dan paso a las manos, al pecho, a toda la epidermis buscando tus vibraciones.

Envolverte en el todo, en la música, en el erotismo del ritmo suave y delicado; erótico en si mismo, en la delicadeza del tacto que se va masificando por todo el cuerpo, ya no son sólo las manos las que te sienten, ya no son sólo los dedos. Las rodillas, las mejillas la nariz, la lengua buscando tu sudor; buscando el sabor salobre y envolvente, absorbente de tu cuello, de tus labios desesperados por besar pero acariciando

El olfato buscando tus aromas... Estimulándose con tu pelo que ya tiene olor a ti, que se va impregnando y registrando en sus detalles de hedor tibio en mi conciencia inconciente. El aroma fresco en tu cabello, fuerte. Tu cuello que se contrae y estira al buscarlo para percibirlo más finamente, màs delicadamente; palparlo con todo el rostro, con los labios que ya se entre abren buscando más betas de sabor, más calor, la textura errática. Con la lengua que ya quiere ser parte de esta exploración que quiere incorporar en el juego y ser perversamente intrusa pero que aún es tierna...

Las manos buscando todos los sectores, bajando desvergonzadamente... Deteniéndose por unos instantes es tus pechos, sin saber como tomarlos. Mis manos no pueden ser naturales, son torpes buscan y anhelan más pero no quieren ser groseras, no quieren tampoco dejar pasar la oportunidad y las ganas de palpar los espacios y los montes. Los accidentes geográficos que crecen y se afirman, que se fortalecen, que se endurecen y se erizan

Esta es la parte donde se te doy el primer beso...

Tierno, potente y receptiva tu... El beso compartido y correspondido. Mi lenguas que se entrelaza con la tuya. La vista que deja de ser un sentido activo, todo lo demás es cerrando los ojos y abriendo la mente y la imaginación.

La música sigue en el entorno pero ya pasa desapercibida, es parte del ambiente pero no la escuchamos, si la necesitamos pero sólo adorna el espacio y el cuadro... El cuadro que se va fundiendo, con dos cuerpos que ya comienzan a tornarse en amorfas formas, que siguen en su desenfrenada búsqueda el uno del otro... Se van poniendo en forma horizontal, o da lo mismo en realidad, se tratan de fundir...

Tu buscando también, explorando, estimulando... tocando sin vergüenzas, con pasión...
Ya no hay frenos... Tus manos están para palpar, no se afirman sólo exploran bajo la ropa, sobre mi cuerpo... Arañan, rasguñan tratando de afirmarse, tratando de no caer en el abismo al que avanzamos inhexorablemente.

Las lenguas siguen cruzadas, los cuerpos siguen fundidos, las ropas ya estorban y asfixian. Queremos volver al paraíso. Allá desde donde fuimos expulsados por vergüenza, por querer taparnos. Queremos volver a estar en estado puro, sin nada, no hay producción, no hay complemento ahora somos tal cual como somos...

Desnudos, puros, agitados, excitados, buscando el lugar más recóndito. Buscando el hedor que emana desde dentro, buscando el gusto salobre del sudor fuete y adictivo que ya se deja sentir... Tus piernas cruzando mi cintura, mis manos afirmando tu cuerpo desde abajo. Mi lengua entrelazada a la suya, yo penetrando su intimidad con pasión y descaro... Sintiendo el calor húmedo que emana de ti... Sintiendo el gemido delicado que se deja escuchar de a poco...
Tus ojos entreabiertos... como queriendo no mirar. Tu respiración agitada, cálida, rápida que se entremezcla con los quiebres de exhalación, que se entremezcla con otros gemidos que cada vez se dejan sentir más fuertes... La humedad creciendo desde tu interior, cada vez más cálida.

Mis corazón casi saliendo desde mi interior, latiendo a la altura de mi garganta... Yo tratando captar todo de ti, de percibir todo de ti , los sonidos, los armoniosos accidentes de tu cuerpo, las profundidades de tu vientre, la exhalación profunda que aflora con gemidos cada vez más potentes... más desgarradores...

Seguir penetrando en ti hasta sacar ese grito reprimido ya nada importa hay que liberarlo, como quien libera un ángel... Hay que sacarlo de su prisión de hielo... La respiración que ya no tiene ritmo... El gemido que se transforma en grito esperando que el bendito ángel del amor pase, vuele, se libere y vaya al cielo. Que luego me mire con tu rostro empapado en sudor con los ojos sin saber si se quieren abrir o se quieen cerrar, recuperando de apoco el aliento, el ritmo cardiaco, la conciencia y la percepción de la música que aún vive delicadamente a nuestro alrededor.

Nuevamente la delicadeza del tacto que retorna desde la rudeza y hasta la ternura...
Volviendo a tocar los labios, ya no buscando los otros, sino que agradeciendo el momento, la magia...

La humedad cálida aún escurriendo entre ambos, manteniendo el abrazo, tierno y ahora delicado... La música vuelve a aparecer... Ahora sólo quiero abrazarte por más tiempo, por la mañana te volveré a besar.

martes, 13 de mayo de 2008

Notas de la soledad de la lucha y otras yerbas...

Hoy mi deber era, cantarle a la patria, alzar la bandera, sumarme a la plaza, pero resulta que la plaza está vacía, no hay nadie a quien cantarle. La patria andaba en el mall, y los revolucionarios se encontraban en una schoperia organizando y programando la próxima marcha, pintando sus lindos lienzos y jactándose de las viejas marchas.

Mejor el pipeño con el que ha aportado mi socio y el recuerdo tuyo mostrándome la elegancia rústica de tu pijama que en la web cam no luce tal y como quisiera palparlo y al menos me deja la sonrisa y la sensación de saber que las cosas son más simples de lo que parecen, más tiernas y más eróticas... ¿o más erráticas? da lo mismo son más, mas ingenuas o más simplemente más.

No creo que vaya a pasar a la posteridad con mi particular forma de hacer revolución en un texto que quiere ser tuyo y no es de nadie finalmente, sobre todo cuando he renunciado a la revolución pasiva y he optado por la revolución de las hormonas, para lo cual no creo tener mejor musa que tu lengua mostrándose graciosa y exsuberantemente en la web cam, más graciosa que tu improvisado desfile de modas casuales con vuelta incluida y aceleración del rítmo cardiaco en, a lo menos dos cuartos de su velocidad habitual.

No optar por seguir creyendo que las utópias son meras formas de creer en las formas más curiosas de cambiar el curso de las cosas cuando no son del modo en que nos gusta que sean, cuando creemos que puede ser mejor y aceptamos que hay que hacer algo más que aceptar el destino tal y como viene, como nos lo imponen.

Por que el crimen si paga y los buenos nunca han ganado sin convertirse en malos, o sino pregúntenle a quienes dispararon a los agitadores sociales que luchaban con sus manos limpias y en alto contra la injusticia de la balanza mal equilibrada, curiosamente siempre en favor del que menos necesita, apestosamente siempre en contra de quien sostiene el modelo de los que imponen y no preguntan.

¿Como mierda la inclinamos hacia el otro lado entonces? no será tomando ni huyendo de la represión oficial tratando de salvar un trapo, mientras el wiski souer refrezca la garganta de quien no le interesa la lucha del proletario. No me interesa marchar entonces y prefiero amar o creer que amo, prefiero soñar con ese giro sin gracia que me muestra, no el envoltorio, si no la imaginación del contenido de su espalda.

Es más productivo entonces pensar sólo un rato en ti que ir al choque contra la java sin abrir. es más convincente para mi causa el creer que habrá causas que si no son más sociales son más graciosas y agradables, más llenas de encanto y ganas de repetirlas.

Hoy mi deber era, cantarle a la patria, alzar la bandera, sumarme a la plaza. pero eme acá alucinando con un destello de luna. eme aca en torno a un pipeño tratando de hacer la lista ordenada y clasificada de los sinsentidos que tienen sentido desde donde no se les mira como algo peligroso. Escuchando las flores dela tumba de un vasquito, esperando darle el hueso de lujo a mi perro. y asumiendo que no habrá más flores en el entierro que cada texto echo a la medida de quien por dos segundos ha iluminado la revolución con el toque desvergonzado de los que quieren viajar libres en el transiveriano.

Que manera de escribir pelotudeces. finalmente todos duermen excepto los que que estamos despiertos, todos aceptan que las cosas son como son, esperan que sigan igual para algún día complir la promesa que le hicieron a sus madres de nunca pasar por la capacha más que no sea por conducir ebrios o deber la pensión alimenticia.