Llámese a licitación pública...

No hace muchos días que en un foro virtual uno de los exponentes planteó, en base a sus conocimientos como estudiante de economía, que debería privatizarse Codelco.

Si la cuprífera se llegara a privatizar estaríamos en la curiosa situación que un país por primera vez en la historia no tiene nada, absolutamente nada, nada para el conjunto del país, como nación, como raza, como pueblo. No tendríamos absolutamente nada. Nada de lo que se produzca ni explote en Chile será de los chilenos. todo, absolutamente todo estará en manos de privados.

En ese triste contexto y puesto que algo debiera quedarle al pueblo chileno, quedémonos entonces con la dignidad de ser la raza porfiada por naturaleza y muramos en la nuestra, así como la del porfiado extremo. Hagámosla completa, Licitemos al Gobierno

Claro pues, por que no llamamos a concurso para cubrir la plaza de Presidente, y llamemos a propuesta pública para licitar la administración del gobierno.

Llamemos también a licitación pública para las fuerzas armadas. para que chucha gastarse tanta plata machucando pelados que más encima hay que tratarlos como mamitos, si se puede subcontratar una empresas de servicios guerrísticos, de genocidio, antiterrorista, apaleadores y coimeros, No me parece que sigan desfilando siempre los mismos patanes con los mismos uniformes, con las mismas armas. Me parece que se debería adjudicar la pega de ser "el ejército de chile" a una compañía que te asegure desfiles de calidad, o sea un evento donde el desfile mismo tenga un valor agregado. Imagínense las minas desfilando sus compases militares con unos zapatos Merrel de ultracombate en todo terreno, unos pantalones de comando FUS, una remera camuflada Lacoste y una guerrera náutica, imagínense a los soldaditos, así como súper marciales, pero con lentes ray ban tipo piloto y un bordado en la solapa de la chaqueta que diga "burguer king" o "coca cola".

Nuestras fuerzas armadas deberían entrar también en este beneficioso modelo de éxito. Para que sacrificarlas en defensa de ideales añejos si podemos modernizarlas y hacerlas entidades rentables y corporativamente estéticas.

Me parece que a la cabeza del emprendimiento como jaguar que somos, como la potencia incipiente, como líderes en la región deberíamos dar el ejemplo de una modernización extrema y licitemos nuestras instituciones. Licitemos la moneda, la intendencia, las gobernaciones. Licitemos los ministerios y las fuerzas armadas y tengamos entidades eficientes, eficaces, modernas, sin los vicios de las antiguas administraciones. A que le tenemos miedo. Vayamos con los nuevos tiempos, si el cambio en inminente seamos los primeros en el mundo en llegar a la ortodoxia misma del neoliberalismo.

Grande Chilito, siempre primeros, los más vivos de todos la hicimos... licitamos al gobierno y las instituciones...

Al final es sólo un cambio en la administración...